lunes, 22 de diciembre de 2008
Carlos Gazzera (*) dijo:
(*) Director de EDUVIM, Editorial Universitaria Villa María
jueves, 18 de diciembre de 2008
Carlos Presman (*) dijo:
Les propongo un ejercicio de desmesura porque este libro se lo merece. Lleva todos los ingredientes que se le pide a una novela: entretenida, ágil, actual, apasionada, reflexiva, profunda, crítica, ambigua y redonda. Un historia de ficción que te agarra del cuello en la primera página y sin importarle el día ni la hora, no te suelta hasta la última. ¿Todo eso? Sí y más…. Por ser una novela extraordinaria, intentaré una presentación extraordinaria que trascienda el lenguaje por eso traje esta matrioska: tradicionales muñecas rusas cuya originalidad consiste en que albergan otras muñecas en su interior. Así funciona Un país para César Ferri, como historias dentro de otras historias, una: la historia familiar. Dos: la historia personal. Tres: la historia política y social. Cuatro: la historia filosófica. Y cinco: la historia sicológica. Me quedo con esta última y digo… En la mitología griega, Narciso era un joven de gran belleza, doncellas y muchachos se enamoraban de él; pero Némesis, la diosa de la venganza, hizo que se enamorara de su propia imagen y acabó arrojándose a las aguas y allí creció la hermosa flor, el Narciso. Jorge recrea el mito de Narciso, que huía de los espejos porque había vaticinado que mirarse a sí mismo sería su perdición. Por lo tanto no lo mató el deslumbramiento de su belleza, como dicen todos, sino el deseo frustrado de saber quién era. En el mito de Edipo, este emprende las averiguaciones para descubrir al culpable de la muerte de su padre, y gracias a Tiresias (el ciego) descubre que en realidad es hijo de Yocasta (su madre) y Layo (su padre), y que es él mismo el asesino que anda buscando. Al saber Yocasta que Edipo era en realidad su hijo, se suicida. Horrorizado, Edipo se quita los ojos y abandona el trono de Tebas, escapando al exilio. César Ferri, en el transcurso de la novela se mira el espejo buscándose, y de principio a fin está la ausencia del padre y la presencia de la madre, si hubiera nacido en Tebas tendría mucho de Edipo, incógnita que los lectores sabrán develar, y agregan a esta novela una urdimbre mítica. UPCF, una novela de Jorge Cuadrado.
Si Romagosa tenía el soporte periodístico de la crónica histórica, esta novela de ficción, es novela pura de puro escritor."
(*) Médico y escritor.
jueves, 4 de diciembre de 2008
Imágenes de la Presentación de Un país para César Ferri de Jorge Cuadrado




El miércoles 3 de diciembre a las 20:30 hs. se realizó la presentación de Un país para César Ferri, segunda novela de Jorge Cuadrado a quien acompañaron Roberto Battaglino, Carlos Gazzera, Jorge Londero, Fernando López y Carlos Presman. El cierre de la presentación estuvo a cargo de Raúl Porchetto, figura mítica del rock nacional, quien interpretó la Canción de Alicia en el país de Serú Giran.
lunes, 3 de noviembre de 2008
Un país para César Ferri

César Ferri ya no se reconoce en el espejo. Acaba de golpear a su mujer y profanar la habitación de su hijo pero no tiene tiempo de arrepentirse. El gobernador lo espera en el aeropuerto para viajar a una reunión clave en la capital. Un semáforo lo detiene en la madrugada y el acecho de dos extraños cambiará el curso de su día.
Me desespero. Perdí el control de mis movimientos y nada de lo que hago tiene sentido. Giro la llave, creo, y pateo el acelerador. El Alfa se ahoga. Esta vez el silbido suena en la vejiga, en los testículos, y me cierra la garganta. Es miedo, Ferri, y no sabés rezar.
Acompañado por una desconocida y mientras intenta dilucidar lo que sucede con el avión del gobernador, Ferri se verá en la disyuntiva de construir su propio país o conformarse con el que hicieron los demás.
La voluntad es pura ilusión. La conciencia, el resultado de impulsos eléctricos y reacciones químicas. Dios, un programador de criaturas biológicas. Frente a tales desafíos, César Ferri se obliga a explorar las cavidades humanas y averiguar quién gobierna en secreto la vida de los hombres.
La prosa directa y sin concesiones de Jorge Cuadrado vuelve a sorprendernos. Con el ritmo de una road movie y un original despliegue de recursos estilísticos y argumentales, el autor de Romagosa, una historia imperfecta, compone sin fisuras otro personaje entrañable, acorralado por la incertidumbre. Como en su primera novela, pero en el siglo veintiuno.
Jorge Londero
sábado, 1 de noviembre de 2008
Un país para César Ferri, capítulo uno.
Habíamos discutido con el desinterés de siempre hasta que Isabel dijo que una puta era menos servil que ella. Me sorprendió, porque no suele usar esos modos, pero aun así esperé una continuación razonable: mi pedido de calma, su última advertencia, un té de hierbas. Te equivocaste, Ferri, lo que hizo fue descargar una andanada de reproches y refregarte todo lo que había resignado por estar con vos.
Entre otras revelaciones, dijo que le hubiese gustado ser actriz. Un buen marido habría pedido perdón por veinte años de indiferencia y aceptado sin objeciones una condena, pero yo ni siquiera había tenido un sueño y no por eso iba a echárselo en cara. Así que cuando le escuché decir que la irritaban mis certezas, solté una carcajada. No hubo tiempo de decirle que no me reía de ella. Empezó a gritar. A repetir que cada día me parecía más a mi padre. No debería haberlo hecho.
Amontono las sábanas usadas y las tiro al suelo para llevarlas al lavarropa. No quiero que Valentín aparezca por sorpresa y las huela en el canasto. Es repugnante oler a padre. Saco de la cómoda un juego perfumado, lo tiendo sobre el colchón y dejo la cama mejor de lo que estaba, tanto que hasta Isabel va a dudar de que pasé por acá. Después recojo mi ropa y camino hacia el baño sin hacer ruido. No quiero despertarla todavía.
Isabel duerme. Le cuesta respirar y ronca un poco. Mi plan es desnudarme y entrar en la cama como un amante furtivo. No tocarla, decirle al oído que me perdone y esperar que ella, dormida o despierta, me pida que la abrace.
jueves, 9 de octubre de 2008
Cuarto Oscuro

- Gusanos Joge Londero
- Afiches Fernando López
- La mandona Roberto Battaglino
- Los ojos del ciego Jorge Cuadrado
- Padrón Carlos Presman
- El desvío Diego Tatián
- Narcisa Cristina Bajo
- Indigestión José Playo
- La causa Miguel Clariá
- La única vez que no voté Reyna Carranza
- El comediante Carlos Schilling